Buenas a todos, panchitos ibéricos del apocalipsis! Celebrando el fin de los exámenes de Selectividad aprovecho para excusarme: con el estudio no se me ha ocurrido ninguna historia buena, pero como no quiero decepcionaros os dejo la segunda entrega de La Hora de la Verdad, que es tan predecible como todos la consideran. No creo que siga con esta historia (¡Bien!) pero tengo varios recursos para crear microrrelatos del tipo que a todos os gustan ;) ¡Se aceptan sugerencias!
V: Entonces... ¿ya está?
N: Sí. A partir de ahora tendremos tiempo para nosotros solos...
V: Noto en tu voz que me ocultas algo.
N: ¿Qué? ¡No, en serio! A partir de aho-
V: ¿Qué es eso?
N: ¿El qué?
V: ¡Eso que hay en la pared!
N: ¿El qu- Ah... ya... bueno, eso...
V: Vuelves a mentirme.
N: ¡No, cariño, en serio! ¡No es lo que parece!
V: ¿¡Entonces ESO no parece un papel de descuento en una autoescuela!?
N: No quería decir eso, me refiero a que-
V: ¡BASTA!
N: ...
V: ¿No te das cuenta de lo mal que me he sentido estas semanas?
N: Mejor que nadie, eres parte de mí. Pero-
V: ¡PERO NADA! ... ¡y ENCIMA me encuentro tu formulario de preinscripción y tu solicitud de admisión a un Colegio Mayor!
N: ¡Eso era una sorpresa! ¡Voy a llevarte conmigo!
V: ¿Cómo?
N: Metida en la guitarra.
V: ... Entiendo. Nos veremos pues.
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